HÔTEL RURAL CASA DE LOS CAMELLOS

Un pequeño oasis en medio de este encantador y tranquilo pueblecito. Ubicado cerca de la plaza, donde se encuentran algunos sitios para comer o tomar algo. Jardines bonitos y bien cuidados, habitaciones amplias con una pasarela dotada de un par de sillas y una mesa por habitación. Difusores de jabón de manos, champú y crema corporal en el baño. Las camas son esponjosas, se duerme muy a gusto, como si te abrazasen. La mujer que nos atendió durante el desayuno es un ángel, adorable, entrañable, cercana... Par desayunar, un sencillo pero completo buffet con embutidos, frutas, tostadas, Yogures y cereales. Sí recomiendo llevar tapones para dormir, ya que las campanas del reloj de la plaza suenan muy fuerte. Por lo demás, todo genial. Muy recomendable. He estado muy a gusto y el trato de todo el personal ha sido maravilloso. Muchas gracias y hasta la próxima!

Bon hotel, amb jardins interiors. El llit és còmode i el servei amable.

Absolutely beautiful boutique hotel. The two star rating is a gross understatement

La verdad es que el hotel es precioso. Las habitaciones son muy bonitas. Es una casa antigua, acogedora y con una ubicación buena en el casco del pueblo. Zona de paseo, restaurantes cerca, esta parte genial.
El personal muy amable y pendiente de nosotros (Nelida y la chica de limpieza del sábado -no nos dijo que nombre- nos atendieron genial).

Como dato negativo tengo que decir que en 3 días de alojamiento,no pude darme un baño de agua caliente. Nos comentaron que había que dejar un rato el agua abierta para que se calentara (más de 5 minutos abierta seguro.. cosa que me parece un despilfarro) . Pero aún así no salía prácticamente nada caliente y salía sólo un hilillo.
Además de esto, en la habitación había un minibar que no funcionaba, y no pudimos tener nada fresco dentro (con ola de calor) y nos comentaron que solo servía como mantenedor... No nos convenció para nada.

Creo que hay más detalles que deberían valorar en las habitaciones (limpieza del aire acondicionado, puertas descascarilladas, grietas en las paredes...)... Cosas a mejorar

Im Hotel waren alle sehr freundlich und hilfsbereit. Das Hotel hat Charme und kanarisches Flair. Alles ist sehr sauber und gepflegt. Die Zimmer sind so, dass man sich im Sommer bestimmt wohl fühlt, da es dort schattig und kühl ist, dagegen ist es in den Wintermonaten dort zu dunkel und kalt. Nachdem es überall in der Gegend Orangenbäume voll behangen mit Früchten gibt, hätte ich erwartet, dass es frischen Orangensaft statt verdünnten Nektar zum Frühstück gibt. Während der Faschingssaison muss man damit rechnen, dass bis frühmorgens gefeiert wird. Während meiner gebuchten Woche waren es drei Nächte in denen die Musik bis fünf Uhr morgens neben dem Hotel dröhnte, bis sechs Uhr morgens zogen dann die Feiergäste laut unter meinem Zimmerfenster vorbei. Anschließend kam die Aufräumkolonne. Mit Hilfe von Ohropax geht es einigermaßen Schlaf zu finden. Für Wanderungen ist die Lage ideal, außerdem gibt es im Ort sehr gute Restaurants.