CASA MARISA
Hôtel fondé sur la lave à peine refroidie, où sentir la chaleur remonter par le sol, pourvu de chambres autour d'une cour fleurie
Il s'agit d'une maison de 15 chambres disposées autour d'une grande cour fleurie. On peut aussi choisir de dormir dans l'un des 7 funkus, les bungalows traditionnels. Le restaurant est ouvert sur la cuisine et une belle terrasse. Comme l'hôtel est construit sur la lave à peine refroidie, on sent la chaleur remonter par le sol, les fenêtres et les portes restent donc souvent ouvertes. Casa Marisa prône le développement local : 100 % d'énergies renouvelables, 80 % de produits locaux consommés et 100 % de salariés capverdiens. Une belle escapade au pied du volcan.
Le saviez-vous ? Cet avis a été rédigé par nos auteurs professionnels.
Comparer et réserver votre hébergement CASA MARISA
Avis des membres sur CASA MARISA
Les notes et les avis ci-dessous reflètent les opinions subjectives des membres et non l'avis du Petit Futé.
Trouver un hôtel à proximité
Trouvez des offres de séjours uniques avec nos partenaires
Questions fréquentes :
![Carte adresse selection](/images/v5/adresse/map-fake-empty.webp)
No tuvimos ni un minuto de agua caliente en toda nuestra estancia. No sólo no salía caliente, si no que estaba congelada. Cuando se lo dijimos al dueño, nos contó una batería de excusas, cada una diferente a la anterior. Según decía, funcionaban con paneles solares y sin sol no hay calor pero durante el día tampoco funcionaba. Al hacérselo saber, nos soltaba lindezas tales como que ducháramos con agua fría que era muy saludable o que con 3 mujeres y un baño era complicado, entre otras. Eso sí, el calor en la habitación era sofocante. El suelo ardía y se hacía imposible caminar descalza. La habitación no estaba limpia, bajo las camas había mucha suciedad. Entre la numerosa fauna que nos acompañaba, contamos un ratón y numerosas cucarachas alguna de las cuales nos entró en el calzado que teníamos dentro de la maleta. Su respuesta fue que era normal porque habíamos abierto la puerta. Supongo que debíamos entrar a la habitación por la ventana o atravesando la pared. La ducha no tenía ni una mísera cortina para evitar la salida de agua o dar algo de intimidad.
Uno de los días, le alquilamos un coche a un precio muy "europeo" pero sin contrato. Nos advirtió de que si nos paraba la policía, les dijéramos que el coche nos lo había prestado y no alquilado.
Pero el peor de los detalles sucedió el último día cuando le consultamos si sabía de algún huésped que necesitara bajar hasta el puerto y, de esa manera, poder compartir un taxi y el precio del trayecto. Nos dijo que él buscaría a alguien y que si no lo encontraba, nos bajaría él mismo o alguien de su personal. Nos hizo esperar hasta la hora de salida para que no tuviéramos tiempo de reacción y nos cobró por el trayecto mucho más que cualquier taxi oficial y más de lo que él dijo que nos cobraría.
Lo único bueno del alojamiento es su ubicación pero Mustafa nos dejó muy mal sabor de boca y una desagradable sensación de haber sido estafadas.