Charmante masia du XIVe siècle, restaurée dans un esprit rustique. Sur ses 6 hectares, une trentaine d’espèces d’animaux, pour le plus grand bonheur des enfants et groupes scolaires qui viennent visiter la ferme : poneys, chevaux, chèvres, autruches, chouettes, et même des zèbres. Côté gîte, 7 chambres douillettes et un restaurant de cuisine locale échafaudée avec des produits de saison et servie dans une salle en pierre. Si vous ne souhaitez pas y passer la nuit, n'hésitez pas à venir y passer la journée en famille !
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Avis des membres sur MASIA CAN SALA
Les notes et les avis ci-dessous reflètent les opinions subjectives des membres et non l'avis du Petit Futé.
A los niños les ha encantado y el monitor que la realiza es muy divertido y amable, es todo un profesional.
Los animales de la granja están muy bien cuidados y ninguno es agresivo. Las instalaciones son muy completas, limpias y cómodas tanto para ir con carro para los más pequeños o a pie. Hay varias zonas de juego y todas rodeadas de animales.
Hemos comido en la masía que ofrece un menú muy completo de 27€ para adultos y tienen otro para niños y juniors. El personal del restaurante es muy amable, eficaz y profesional.
Tienen parking privado y gratuito.
Por añadir alguna crítica constructiva añadiría más animales como por ejemplo cerditos que solo hemos visto uno y no sabemos debido a que o alguna vaca.
Volveremos seguro, nos ha encantado!!!
Recomendable!
No me volvería a quedar a comer eso si, el restaurante y su comida para nada están a la altura de su precio.